Presentamos una excelente oportunidad de inversión en Mojácar: un encantador cortijo tradicional de 101 m², lleno de carácter y con un gran potencial de reforma. Ubicado en un entorno tranquilo, esta propiedad ofrece lo mejor de la vida rural sin renunciar a la cercanía con la costa y los servicios esenciales.

El cortijo conserva la esencia de la arquitectura típica de la zona y brinda la posibilidad de ser restaurado para convertirse en un hogar acogedor o en una segunda residencia con encanto. Su entorno natural lo convierte en un lugar único para disfrutar de la tranquilidad, el aire puro y el contacto con la tierra.

La finca cuenta con un terreno agrícola amplio y muy versátil, dividido en dos áreas: una de secano con olivos y otra de regadío, perfecta para el cultivo de frutas, verduras y hortalizas, como se ha hecho durante años. Esta característica convierte la propiedad en un lugar ideal para aquellos que sueñan con tener un estilo de vida sostenible, combinando la agricultura tradicional con la comodidad de vivir cerca de la costa.

Además, la parcela ofrece espacio suficiente para construir una piscina privada y habilitar una zona de aparcamiento, lo que aumenta aún más las posibilidades de personalización y disfrute. La amplitud del terreno proporciona libertad para diseñar jardines, huertos o espacios de ocio al aire libre adaptados a las necesidades de cada propietario.

La ubicación es otro de los grandes atractivos de esta propiedad. Situada a tan solo 15 minutos en coche de las playas de Mojácar, combina la tranquilidad de vivir en el campo con la comodidad de tener el mar a pocos kilómetros. En apenas 5 minutos se puede acceder a supermercados, bares y restaurantes, lo que facilita el día a día.

Para los amantes de la naturaleza y las actividades al aire libre, el Parque Natural de Cabo de Gata se encuentra a menos de una hora de distancia, ofreciendo senderos, playas vírgenes y paisajes únicos de gran valor ecológico. También, la cercanía con localidades como Garrucha o Vera permite disfrutar de una amplia oferta cultural, gastronómica y de ocio.

Este cortijo es perfecto tanto para quienes buscan un refugio tranquilo en el campo como para aquellos que desean realizar una inversión con futuro, ya que la zona de Mojácar mantiene un alto interés inmobiliario. La posibilidad de reformar la vivienda según los gustos y necesidades personales hace de esta propiedad una oportunidad única en el mercado.

En definitiva, se trata de una propiedad con encanto, gran potencial y una ubicación privilegiada, ideal para quienes valoran la tranquilidad, la naturaleza y la cercanía al mar.